Si un sueño existe, también existe la forma de convertirlo en realidad. Pues, ¿en qué lugar hay una vida sin muerte? Pero si sólo es una imagén que crean nuestras mentes entonces podemos técnicamente hacer del sueño un arte. Una vez más, obtengo pistas que somos arte de un perfecto, sensible y muy dotado artista que naturalmente escribe un texto constituyente de las ideas y líneas donde nos movemos. Los sueños son arte dentro una obra que cobra vida y niega el destino que fluye el arte. Los sueños son reales, pues son arte y el arte está en la realidad...